11 de noviembre de 2010

En el 50 Aniversario del Ataque al Congreso: Loa a los Héroes y Mártires de la Nación Puertorriqueña


Por: Juan Manuel Delgado



Mucho se ha escrito sobre el heroico ataque de un comando nacionalista realizado al Congreso de Estados Unidos en 1954. No utilizaré este espacio para recordar la madeja de detalles que entrelazaron los sucesos de ese glorioso acontecimiento. Mi espacio solamente tiene dos objetivos: recordar los nombres de sus protagonistas como una muestra de gratitud en este sincero homenaje y reflexionar sobre la acción revolucionaria de aquellos titanes.


Puerto Rico es un pueblo colonial. En el proceso histórico de la antropología correspondiente a la puertorriqueñidad, como nación diferenciada, estamos por cumplir dos siglos. Son dos centurias muy dolorosas de historia colonial. Los pueblos coloniales van construyendo la historia mediante los códigos, categorías y límites que le impone el colonizador. Y en ese proceso ideológico algunos colonos cooperan con el discurso que impone el que pretende dominar. El coloniaje es tan devastador que aún entre los que fungen como portavoces de la liberación se escuchan voces idénticas a las de sus amos. Son las voces de los esclavos ladinos disfrazados de libertadores. Son los cachacos, como diría el jíbaro, muy adheridos a las mamas del presupuesto colonial y su vida de burguesitos privilegiados. El colonialismo es así. Y como la historia es un arma política, verdad tantas veces dicha en Puerto Rico antes que la dijera Manuel Moreno Fraginals, nuestra historiografía es colonialista. Como historia oficial la imponen en escuelas y centros universitarios y a través de todos los aparatos ideológicos del Estado como muy bien los describió Louis Althusser.


Pero la historia colonial, como toda contradicción, siempre tiene las expresiones en acciones y narraciones que le son contestatarias. Y con ese cuadro, siempre de entrada, nos corresponde en este día intentar combatir esa historia oficial que siempre ha condenado, desvalorizado o subestimado nuestras gestas libertarias. Y en ese contexto es que surge la necesidad de reflexionar sobre la acción de nuestros guerreros. Es como intentar ir más allá de los hechos para acercarnos a su significado histórico.